Suena algo controversial realizarse un peeling en verano. Pero recordando la definición de peeling: se trata de una sustancia química aplicada la cual generará una exfoliación controlada con fines terapéuticos, cosméticos o preventivos. En caso del llamado “Peeling de verano” se trata de una aplicación preventiva.
Cuando nos exponemos al sol (RUV) se generan una serie de reacciones fotoquímicas (cambios químicos en la piel inducidos por fotones), en las cuales se generan radicales libres de oxígeno altamente reactivos así como cambios en el ADN (llamados dímeros de pirimidinas ciclobutano) , disminución de la actividad de las células que nos defienden de infecciones cutáneas, aumento de producción de melanina y activación de metaloproteinasas las cuales “destruyen “ nuestro colágeno y fibras elásticas . ¿No suena nada divertido no? Como se traduce esto: en envejecimiento prematuro, manchas, arrugas, mala calidad de piel y aumento en el riesgo de cáncer de piel.
Por todo esto debemos usar todas las estrategias a la mano para disminuir el daño solar. Además de la fotoprotección física que es básica (ropa con UPF 50+, sombrero, sombrilla), foto educación, evitar horas de máxima RUV, protector solar tópico diario y reaplicar. También se recomienda el uso de antioxidantes.
Los antioxidantes son sustancias que tomadas o aplicadas pueden ayudarnos a disminuir y/o neutralizar algunos de los radicales libres formados por la exposición a RUV. OJO, esto NO es tener permiso para broncearse o exponerse sin protección. Es una forma de atenuar el daño.
Uno de los antioxidantes más nobles es el Acido Ferúlico, el cual estabiliza a otros antioxidantes como vitamina C + E y también ha demostrado un efecto sinérgico con protectores solares. Es un derivado fenólico no irritante, derivado de plantas y semillas encontrado de manera ubiqua en la naturaleza. También en un inhibidor débil de tirosinasa por lo cual previene pigmentación. El uso en sueros de uso diario se recomienda al 0.5% pero su aplicación en peeling funciona al 12%. Este genera protección por varias semanas y la descamación es prácticamente imperceptible.
Se pueden agregar otros antioxidantes después del verano como vitamina C en forma de Peeling (concentrados) o tópicos con Fotoliasas, las cuales son enzimas que por medio del mecanismo llamado fotorreactivación, revierten los dímeros formados por RUV. Acude con tu dermatólogo quien te dará todas las herramientas para disfrutar el verano de manera responsable y cuidando tu piel.
