
No todos los gorros son iguales para protegerse del sol. ¿Existe una gorra más adecuada para protegerse del sol? ¿Son todos los gorros iguales? ¿El pelo me protege del sol? En el siguiente articulo aclaramos estas dudas.
¿Qué gorros son mejores para protegerse del sol?

Existen varios estudios en la literatura que estudian el estilo de gorro y la calidad de la protección ultravioleta que proporciona.
Así, hace tiempo que sabemos que la tradicional gorra de lana con visera o “flat cap” (la gorra del vendedor de periódicos en el semáforo de la av. de tu ciudad), tan preferida por los hombres mayores y que ha vuelto a la moda con los “hípsters”, NO ES BUENA PARA PROTEGERSE DEL SOL.
Sólo es eficaz en la zona de la coronilla, que es la que protege. La “gorra de béisbol” ofrece mejor protección en la nariz, pero poca en las caras laterales de la cara.
Así, los gorros que protegen de manera más razonable son aquellos que tienen más de 7 cm de visera alrededor de la nariz y las mejillas, el mínimo exigible es 3 cm. Cumplirían estas características varios sombreros, como el “sombrero de safari o Boonie”, la “pamela”, el “sombrero vaquero o tejano”, el “sombrero panamá”, el “sombrero de paja”.
Otros factores a considerar a la hora de elegir gorros para el sol
Existen varios factores a tener en cuenta, no sólo la forma y el estilo:
• El material del que esté hecho el gorro: Los mejores son los que llevan fibras y materiales con factor de protección solar 30 o superior, mejor 50 (SPF50).
• El color: con respecto al color, protegen más de la radiación ultravioleta los gorros de colores oscuros, como negro o azul marino.
• La posición del sol: En verano la radiación ultravioleta que llega al cuerpo es tres o cuatro veces mayor. El índice UV que llega a nuestra ciudad en esta época es extremo por eso la importancia de usar métodos de barrera contra la radiación.
¿Si me pongo un buen gorro o gorra, necesito ponerme crema de protección solar?
Si debería, los gorros reducen la cantidad de radiación ultravioleta directa a la mitad o diez veces menos, pero sigue llegando. Especialmente sensible es la nariz y la zona de alrededor, las mejillas y el labio superior.
Recordemos que los gorros no evitan la radiación ultravioleta reflejada en la cara, y que los gorros no evitan la llegada de radiación a las zonas de la cara más sensibles a la aparición de cáncer cutáneo
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¿El pelo me protege del sol?

Sí. En un estudio realizado por un grupo español encuentran que el pelo, efectivamente, protege la piel de nuestra cabeza de la llegada de radiación ultravioleta UVB Y UVA.
Está protección se relaciona con la densidad del pelo, con el grosor del pelo y con la presencia de melanina, es decir, es mayor en pelos más oscuros.
El estilo es importante a la hora de seleccionar un gorro o gorra para protegerse del sol, y es aún más crítico en pacientes con antecedentes de cáncer cutáneo o sensibilidad solar.
Utilizar gorro no debería sustituir el uso de cremas de protección solar ya que no evita la llegada de radiación ultravioleta a las zonas de la cara donde el cáncer cutáneo es más frecuente.
Por lo tanto recuerda siempre aplicar tu Protección solar al iniciar el día con tu rutina diaria, luego reaplica cada 4 horas tu protector, hay diferentes métodos que puedes usar para reaplicar el protector solar, las brochas y los compactos son una excelente manera. Una recomendación ideal seria aplicar filtro solar a las 8 am / a las 12 m / 4 pm. Estos horarios puedes ser modificables, depende de tu rutina diaria y tu estilo de vida. Te invitamos a una valoración sin costo y así organizar tu SkinCare.